Compartiendo una visión de la práctica artística comunitaria persiguiendo la transformación social de los contextos, entendidos éstos como lugares de convivencia, territorios en donde las personas participativamente se nutren de experiencias creadoras, nace esta iniciativa de colaboración entre el Proyecto de Intervención Comunitaria Intercultural (ICI) de Taco y la Universidad de La Laguna (ULL) en Tenerife. Desde el 2018, estudiantes del Grado en Bellas Artes participan en los procesos de creación de la Acción Global Ciudadana CONviveTACO que se celebra anualmente en los diferentes barrios de Taco. Su finalidad es favorecer el encuentro y las relaciones comunitarias en torno al espacio público y que, en última instancia, contribuya a promocionar la convivencia en Taco. Planteamos esta colaboración bajo el interés compartido por los procesos comunitarios y desde un enfoque basado en las prácticas artísticas participativas que conocemos como arte comunitario en las que el arte como parte misma de la cultura se transforma y se hace accesible a la ciudadanía. Actualmente también hablamos de un arte socialmente comprometido con la que Helguera (2011) subraya la importancia de las interacciones sociales en su proceso. Desde la asignatura de Teoría y Contextos de la Educación Artística, proponemos a los artistas-estudiantes desarrollar proyectos en contextos sociales, entre los cuales brindamos CONviveTACO y sus barrios como un espacio de aprendizaje para diseñar sus intervenciones de creación artística comunitaria. Desde esta perspectiva, se apuesta por la metodología del Aprendizaje y Servicio (ApS), fomentando un aprendizaje real, al tiempo que se involucran en el logro de unos objetivos concretos en la comunidad de Taco, la convivencia. Batlle (2011) apunta como ese compromiso social acompaña al éxito de la experiencia pedagógica. Estos proyectos despiertan una visión de las artes adecuándolas a los contextos en los que se sitúan, despertando la inquietud artística y haciendo partícipes a toda su comunidad vecinal. La implicación del alumnado en cada barrio se convierte en un aprendizaje multidimensional desde lo que supone vivenciar encuentros intergeneracionales interactuando con otras personas, reconocerse ellos y ellas mismas en un escenario vivo en el que deben posicionarse como agentes activos y finalmente como mediadores de procesos artísticos de creación participativa. Desde el proceso comunitario de Taco la participación de estudiantes en los procesos del CONviveTACO aporta un valor añadido a los proyectos que vecinos y vecinas tienen en marcha. Desde la perspectiva de la ciudadanía, se genera un proceso de transferencia de conocimiento mutuo. En este sentido, en ocasiones, se generan auténticas comunidades de aprendizaje, en el que todas las personas, la vecindad y el alumnado, cuentan con un potencial educativo y educador, los cuales, a su vez, se reconocen educadores y educandos y ponen al servicio del grupo su deseo de aprender y sus conocimientos. Precisamente estos lazos humanos y sociales entre nuestros estudiantes y los vecinos y vecinas de Taco han tenido un impacto significativo en su compromiso hacia los proyectos y al deseo de mantener una continuidad con CONviveTACO más allá del vínculo académico que lo originó.