Un cráneo, una cebolla, una habitación, una cama son un fanzine. Cambiando las reglas en el aula de dibujo. I María del Mart Mendoza Urgal
La literatura como medio de sugestión y el fanzine como lugar de expresión son los componentes que hacen que los lugares comunes de la creatividad se encuentren y se compartan desde la práctica del dibujo. Didi Huberman, Georges Perec, y muchos más escritores son la fuente de la que se puede beber cuando uno tiene sed y no sabe donde está el agua. Un fanzine como elemento subversivo de expresión donde el intermediario desaparece en el proceso de difusión y distribución. El artista como único manipulador de la información y único distribuidor de su mensaje. Y el aula de dibujo como lugar de encuentro de todos estos aspectos. La creación de fanzines como práctica artística para el desarrollo de capacidades críticas, reflexivas, creativas, etc. y la literatura como fuente de conocimiento, son los fundamentos de una estructura que ayuda a cambiar las reglas de la enseñanza en el aula de dibujo, rompiendo los límites propios y recuperando las tradiciones más contemporáneas. En este fotoensayo se pretende mostrar el poder de seducción que el fanzine provoca en un grupo de alumnos de primero de la asignatura de Fundamentos de Dibujo del Grado de Bellas Artes de la UCM.